El aumento de las ventas de vehículos de cero emisiones tiene que ir acorde con los puntos de repostaje o recarga.
Según la directiva revisada de la Unión Europea, tendría que haber un punto de recarga de eléctricos cada 60 kilómetros y una hidrogenera cada 150 kilómetros antes del 31 de diciembre de 2030 en la red transeuropea de transporte (TEN-T) principal y en los corredores secundarios. En el caso de España, incluye las principales autovías.
La Unión Europea exigirá que cada punto de repostaje de hidrógeno esté separado, como mucho, de otro por una distancia de 450 kilómetros. La presión exigida de los surtidores será al menos 700 bares y una capacidad mínima de 2 toneladas/día.