La Comisión Europea quiere crear una base de datos que certifique cual es la huella de carbono de los combustibles bajos en carbono y del hidrógeno.
Hoy en día, el 96% del hidrógeno producido tiene origen fósil, por lo que certificar su huella de carbono es la forma de que los nuevos combustibles sean más transparentes y se pueda realizar su trazabilidad.
Con la creación de esta base de datos la Comisión prepara un conjunto de leyes en a UE para que el sector gasista se descarbonice. El objetivo es que se certifiquen los gases renovables y promover su uso.